[Arthur Onken] Lovejoy se sometió una vez a sí mismo a un interrogatorio del Senado de Maryland, al ser nominado al consejo de regentes de educación del estado. Un legislador le preguntó a Lovejoy si creía en Dios. George Boas recuerda: "he sido informado fidedignamente de que en respuesta Lovejoy desarrolló ampliamente treinta y tres definiciones de la palabra Dios, consumiendo entre tanto quince cigarrillos y medio, rehusándose a ser interrumpido o contrariado, y terminó por preguntar al miembro del comité cuál de esos significados había tenido en mente al plantear la cuestión". Según cuentan, nadie se sintió animado a hacerle otra pregunta, y Lovejoy fue confirmado. Por unanimidad.
(Tomado de un artículo de Dale Keiger)
Quiero hacer notar los quince cigarrillos y medio. Y recordar que Lovejoy escribió una buena novela: The Great Chain of Being. O la dictó como conferencia en Harvard. O algo así. También fundó el Club Hopkins de Historia de las Ideas que, como parte de la misma gran cadena, terminó dando origen a los ECTS.
4 comentarios:
Qué bien, es cagado que mientras unas personas fuman quince cigarrillos y medio mientras respondan treinta y tres definiciones de Dios yo sólo hubiera dicho algo así como "no me estén chingando" o "no" o "sí".
Yo creo que me habría estragado al tercero.
Hay varios modos de decir "no me estén chingando", pues.
Y es claro, por hacer más enfático el punto de Guillermo, que exponer treinta y cinco definiciones de Dios es una manera de hacerlo.
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